Para llevar a cabo una clase enriquecedora, en la que se alcancen los propósitos de la educación que se imparte, no siempre es necesario invertir mucho dinero. Lo que si resulta necesario es invertir tiempo, dedicación y creatividad.
En casa, generalmente contamos con recursos, materiales u objetos que fácilmente pueden ser empleados como material didáctico, y que por su uso diario acercan al alumno con la cotidianidad de las cosas, y a su vez con la naturalidad del aprendizaje.


Éste es solo un ejemplo de lo que puede elaborarse a partir de los materiales y recursos con los que se cuenta en casa. Las posibilidades son ilimitadas.
Hola buenas tardes:
ResponderEliminarExcelente blog, muchas felicidades.
Saludos desde la tierra Tolteca en el estado de Hidalgo, México.
Saludos!! Gracias!!
ResponderEliminar